Hacer una autopsia es un trabajo sucio, pero alguien tiene que hacerlo (supongo). Y hay que decir que gracias a esas personas que se dedican de lleno a este oficio, se han conseguido grandes avances en medicina. Sin embargo, esto no hace el momento de diseccionar un cuerpo menos aterrador.
Por otra parte, si nos basamos en estas fotografías de principios del siglo 19, veremos que estos futuros forenses y cirujanos disfrutaban bastante su trabajo. Tanto así, que no dudaban en posar junto a sus cadáveres como si fueran un miembro más del equipo. ¡Qué tiempos aquellos!
“Fox” y los chicos.
¿Nos vemos bien fumando mientras hacemos la autopsia?
Este seguro es el nombre de su banda de rock.
No me gusta cómo luce esa pierna.
Los cigarrillos están bien, ¿pero una pipa?
Esta gente no tiene corazón.
Probablemente hay unos cien fantasmas en esta habitación.
Este tipo de cosas hace pensar que ellos mismos la mataron.
“Ella vivió por otros, pero murió por nosotros”.
¿Esto es una tarjeta navideña? No entiendo nada…
“Lo alejamos de sus preocupaciones mortales”.
El cráneo le da un toque bonito a la foto.
Todo ha terminado.
Así se ven algunas oficinas los lunes.